Una historia entre un gato y una niña se deja
captar en el lente del fotógrafo, una gran sensibilidad se percibe, la puesta
en escena es fundamental pero la interacción entre la niña y el gato es
primordial. El color dramático y con visos de antigüedad brinda unidad gráfica,
además los únicos personajes que figuran allí son la niña pero el gato
inevitablemente se roba la atención y es el punto de enfoque, el aguzamiento.
Con 31 fotografías en total, la serie cuenta con
retoques digitales que permiten darle una personalidad al gato, y un
crecimiento evidente en la niña, lo que permite inferir que las fotografías poseen
un carácter cronológico.
Con sede en San Petersburgo, Rusia, el
economista de profesión y fotógrafo por vocación Andy Prokh,
ha captado estas espectaculares fotografías a blanco y negro, que cuentan la
bella historia de amistad entre su adorable hija Katherine y su gato llamado
LiLu Blue Royal Lada.
Andy ha estado capturando esta gran amistad desde
que nació su hija. En ese momento el gato ya tenía dos años de vida, por lo que
prácticamente Katherine ha pasado toda su vida al lado de LiLu Blue Royal Lada.
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